
Encontré este libro tan apasionante que lo leí en un día. Claire Sylvia narra la historia de su enfermedad y el consecuente transplante de pulmones y corazón cuando, según su médico, le quedaban pocas semanas de vida.
A lo largo de la historia, Claire experimenta situaciones que no puede explicarse, y que yo tampoco os desvelaré, sincronías y casualidades sorprendentes y la certeza cada vez más fuerte de que los órganos transplantados en su cuerpo también tienen una memoria celular que modifica sus emociones, pensamientos y sensaciones.
Dos de los antojos que la autora tiene en cuanto la dejan salir del hospital son tomarse una cerveza e ir al Kentucky Fried Chicken a comerse unos nuggets de pollo. Lo sorprendente de estos deseos es que, antes de la operación, a ella ni le gustaba la cerveza ni la comida basura.
El libro está escrito en 1997 aunque, bien podría ser de hace unos meses, la incomprensión de la medicina tradicional ante la posibilidad de que el espíritu, alma o como queramos llamarle del donante se inmiscuya en el sentir de quien recibe los órganos, sigue casi tan vigente hoy como en el pasado.
El libro nos proporciona varios ejemplos de otras personas que habiendo recibido un órgano de otro ser humano experimentan cambios inexplicables en sus gustos e incluso en su personalidad.
Personalmente creo que el relato es tan verosímil que se me hace difícil entender que alguien lo ponga en duda. Cuando finalmente conoce a la familia del donante comprueba que los antojos de éste son aquellos para los cuales ella no encontraba una explicación lógica.
El libro, basado en una historia real, es mejor que un thriller de James Bond. Cada capítulo es una sorpresa y, justo cuando creemos que ya no puede suceder nada más, va y sucede.
Escrito desde la sinceridad que da vivir una historia en primera persona, bien documentado, con referencias y reflexiones interesantes, me hizo pensar en lo poco que sabemos de la vida, de la muerte, de como funciona todo, de qué nos depara el futuro y, a la vez, de lo maravillosa que puede ser la existencia cuando estamos dispuestos a abrir la mente y el corazón.
Un libro muy interesante que no he encontrado traducido al castellano pero que, si se os da bien leer en inglés, os recomiendo encarecidamente.
¡Feliz semana!